La comodidad es algo realmente importante pero, también, va íntimamente ligada a la salud. ¿Sabes que nos pasamos más del tercio de nuestra vida tumbados? Por eso, elegir un buen colchón es algo que debes tomarte en serio porque de él depende el descanso merecido que hará que rindas durante todo el día, que evite que tengas molestias musculares y que regule tu salud a niveles que ni te imaginarías.
Un buen colchón, acorde con tus propias necesidades
No todos somos iguales y nuestras necesidades personales hay que tenerlas en cuenta para que ese descanso sea total:
- Las personas que sufren de circulación necesitan un colchón más flexible que se adapte mejor a la anatomía de su cuerpo. El somier es otro artículo de gran importancia, y más cuando las recomendaciones es que podamos tener alzada la parte superior del cuerpo.
- Para tod@s l@s que sufren el calor y las noches de insomnio son incontables debido a este motivo. El aire acondicionado toda la noche puesto, además de conllevar un susto en la factura de la luz, no es nada recomendable para nuestro aparato respiratorio. Nuestro colchón tiene mucho que ver en esto ya que, si se escoge entonces un colchón hecho de muelles porque son más transpirables, al igual que un viscoelástico perforado, que nos garantiza más frescor y hace desparecer los focos de calor en el colchón.
- Para los que son propensos a las alergias no hay nada mejor que los colchones antibacterianos y antiácaros, además de añadir al mismo un buen protector de colchón con este mismo tratamiento.
Cuando se elige el colchón adecuado, el descanso que se obtiene es más profundo ya que, como es evidente, debemos tener en cuenta que nuestro cuerpo no puede descansar completamente en un colchón demasiado suave o con cierta flacidez. La razón de esto es que constantemente está intentando compensar las posiciones poco ortodoxas que adapta el cuerpo en este tipo de colchones.
Como podemos comprobar, no solo se trata de darle la correcta postura a la columna vertebral, también es importante para otras partes del cuerpo como el cuello que requieren de un espacio cómodo y acogedor para beneficiarse de una buena noche de sueño.